
JUAN VILLALOBOS, CALÍGRAFO. No sé si Juan Villalobos era pintor, calígrafo o poeta. Quizá, lo fue todo. Lo que sí sé es que sus dibujos se asemejan a un álbum donde encontramos toda una colección de pequeñas composiciones que yo entiendo como obra única. Obra que demuestra no sólo el manejo de las tintas, sean monocroma o no, sino también el sentido del orden. Estas dos cuestiones, la composición y las tintas, me llevan a pensar que el fin que perseguía Juan Villalobos era no presentarnos unas creaciones con talento, ni reflejar lo sublime que puede llegar a ser el mundo, quería expresar sentimientos. Y la caligrafía o los ideogramas son los mejores medios para materializar los pensamientos, eso sí, con vitalidad y con delicadeza. Sabía muy bien que hacía con sus caligrafías verdaderos poemas, y lo hacía seducido para que fueran obras de arte que él trataba en su casa, todo lo opuesto a exponerlas. Allí, en su estudio se planteaba los problemas del ar...