
MIRAR UNA CIUDAD Mirar una ciudad no es tan sencillo como parece. Además de tener los cinco sentidos puestos en sus calles y sus gentes, se necesita memoria para poder comprender cómo se ha forjado a lo largo de los siglos. La ciudad así entendida se nos presenta como un escenario donde actúan muchos protagonistas. El guion lo marca el tiempo y los decorados van cambiando a la par que se multiplican los puntos de vista. Posiblemente, dos catedrales o un convento de grandes proporciones convertido en Parador y situado en la Mota donde se originó la ciudad, palacios que introdujeron las ideas renacentistas en Extremadura, edificios modernistas como destinado en principio al colegio marista, luego cuartel y hoy centro universitario, o inmuebles deportivos como el pabellón de Sainz de Oiza, por citar algunos ejemplos, han ido configurando una secuencia en la Historia que ha contribuido a dar sentido a la trama urbana. No son más que testimonios mudos que...